Aquí uno experimenta como en este tiempo de secularismo se palpa en la Piedad Popular una riqueza de la expresión del amor profundo al Señor y la Virgen. Cuando uno contempla los autos y carretones decorados como verdaderos “altares en movimiento”, a los Cuasimodistas a caballo, bicicleta y la así “llamada infantería”, ya que no pudieron tener ese día una cabalgadura o venían de lugares tan lejanos como Coelemu, Parra, Rancagua, Marchihue… y que vienen a agradecer a Dios por lo que les ha sido regalado uno se emociona.
La procesión de entrada se congregó desde la alborada en la Avenida 5 de Abril y copando muchas cuadras. Hasta allí llegué en coche con la Presidenta Nacional del Cuasimodo y comenzamos a las 10.30 hrs. la peregrinación de entrada. Recién a las 13.00 hrs. pudimos comenzar la Misa, en una explanada repleta de caballos, bicicletas, pero sobre todo de los carretones de los feriantes.
Esta vez tuvo la particularidad que en este Año de la Fe se unió el Encuentro de la Piedad Popular a la 38ª Peregrinación Nacional del Cuasimodo, por lo tanto junto a ellos, estuvieron presentes la riqueza de los Bailes Religiosos y la hondura del Canto a lo Divino.
Los Bailes Religiosos contribuyeron bellamente a la celebración trayendo con una danza el Evangelio de Chile. Teníamos susto que los instrumentos asustaran a los caballos, pero todo se desarrolló con naturalidad. Luego de la consagración los caporales hicieron una danza de alabanza y adoración al Señor presente en el altar.
En varios momentos los Cantores a lo Divino regalaron hondura religiosa a la misa. Cada vez que entonaban un décima, se recogía el alma y se vivía un momento de profundidad. Por algo, acertadamente nuestro Cardenal Francisco Javier dijo que son: “místicos populares”. Para ellos fue también una experiencia maravillosa, ya que están acostumbrado a cantar en pequeños grupos, pero otra cosa es hacerlo en la explanada del Santuario bullente de personas y peregrinos.
Al finalizar la Misa un grupo de representantes de este mundo de la Piedad Popular nos encontramos a almorzar con Mons. Ezzati. Junto a Cuasimodistas, Cantores a lo Divino y miembros de los Bailes, habían miembros de los Equipos de Pastoral de los Santuarios y folcloristas unidos a la Piedad Popular. Allí fueron presentándose y relatando el significado de esta experiencia religiosa para ellos.
Culminamos ese día con un Encuentro Abierto donde cada una de estas expresiones de la Piedad Popular relató la forma como se daba la trasmisión de la fe en su forma de vivirla.
El P .Aldo Gajardo, Rector de Lourdes nos manifestó como los Santuarios son una reserva espiritual de la Iglesia y como a pesar de las turbulencias vividas en ella la cantidad de peregrinos no sólo no ha menguado, sino que ha aumentado. Recalcó la realidad de los Santuarios como lugares privilegiados de encuentro con Dios, de encuentro de familias que vienen a rezar, de oasis para los no creyentes y de reencuentro con Dios y la Iglesia de los alejados. Culminó su ponencia planteando como en los santuarios uno se encuentra permanentemente con las “periferias existenciales” y, por lo tanto, es un lugar de la “misión paradigmática”, citando las conocidas motivaciones del Papa Francisco.
Verónica Rodríguez, Presidenta Nacional del Cuasimodo, fue relatando el proceso vivido por ellos en cuanto a la evangelización, catequesis e integración en las parroquias y santuarios gracias especialmente al P. Domingo Alamos (+). Las peregrinaciones anuales a Maipú, Auco, Pelequén y Santuario del P. Hurtado generan un calendario pastoral, que prolongan cuasimodo más allá del Domingo de Cuasimodo.
Sobre el Canto a lo Divino nos habló Manuel Jesús Araya, de Placilla. Nos volvió a recordar que esta fue una forma de evangelizar ante gente que no sabía leer ni escribir en los campos chilenos, que hoy recupera vigencia y se está integrando a la liturgia.
Laura Pino, Presidenta de la Federación de Los Bailes Religiosos, nos relató el sentido del traje – que no es un “ disfraz”- , sino que tiene la riqueza del hábito religioso, por eso uno se prepara un año para poderlo recibir, después de una bendición de éste y solemne imposición. Nos habló de la tarea del caporal, no solo como conductor, sino también como educador y formador del baile, por último el hecho de la preparación espiritual y organizativa de cada fiesta, y por lo tanto el “danzar” se transforma en una vivencia religiosa. De allí el dolor de no poder danzar, sea por alguna sanción o problema de otro tipo.
Las palabras finales de Mons Ezzati, hicieron énfasis en la fe como el don más importante de la vida, y lo religioso como el patrimonio más valioso de Chile.
Tal como lo subrayó el Documento de Aparecida destacó la inquietud por la trasmisión de la fe y la riqueza de la Piedad Popular como una forma de trasmisión de la fe, que es un tesoro para América Latina.
Con la recitación del “Bendita sea tu pureza…”, acompañada por el Canto a lo Divino, la bendición de nuestro Arzobispo y la despedida a la Virgen de los Bailes, concluyó este gran día de la Piedad Popular, que nos impulsa a potenciarla, especialmente como una forma de evangelizar y trasmitir la fe.
*Marta Harnecker: conocida marxista chilena, surgida de la AUC en los años 60 y que escribió uno de los manuales sobre el marxismo más difundido en el mundo hispanoparlantes.
** Entre ellos se encuentran Beatriz Di Girolamo, Gonzalo Cienfuegos, Gerardo Zenteno…
Fuente: Comunicaciones Iglesia de Santiago
www.iglesiadesantiago.cl
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