La idea de la conmemoración surgió en conversación con el obispo diocesano, monseñor Juan María Agurto y el equipo de la diócesis que, apoyados por sus comunidades, prepararon una hermosa Eucaristía en acción de gracias por todo este tiempo en que el Movimiento ha estado presente en la zona.
Luego de la misa los participantes se reunieron para un compartir fraterno en las dependencias del Colegio Seminario Conciliar de Ancud. En esta instancia los miembros del movimiento pudieron expresar sus sentimientos de alegría, agradecimiento al Señor y al EMM por todos los años de unidad matrimonial y de servicio a la Iglesia y a la familia.
En la Diócesis de Ancud el movimiento está dirigido por el Fray Pedro Cisternas y por el matrimonio conformado por Milton y Graciela.
Para más informaciones sobre el movimiento contactar al fono 65709149 o 84242131
Sobre el EMM:
Encuentro Matrimonial Mundial nació en España, en el año 1965, por iniciativa del sacerdote jesuita Manuel Calvo quien, trabajando con los jóvenes y dándose cuenta de la importancia que tiene la relación entre los padres para el crecimiento de los hijos, pensó en un instrumento para facilitar el diálogo entre los cónyuges con el fin de reforzar el “sí” que llevan en el propio corazón. Después de algunos años de experiencia llegó a los Estados Unidos de América, desde donde se propagó rápidamente a otros países.
El movimiento tiene la finalidad de ayudar a los cónyuges a vivir su propia relación de forma responsable, mediante un diálogo auténtico, mediante la pertenencia a una comunidad de apoyo y la participación en fines de semana de encuentros matrimoniales, organizados para matrimonios que quieren aprender a conocerse más profundamente y a revitalizar su vida conyugal y su relación con el Señor. Los encuentros están animados por el testimonio de tres matrimonios y de un sacerdote que tratan distintos aspectos de la vida cotidiana. La experiencia también está abierta a sacerdotes y religiosos deseosos de vivir de forma auténtica la propia vocación, y a matrimonios no creyentes.
El movimiento está dirigido en todos los niveles (local, diocesano, regional, nacional) por equipos eclesiales constituidos por un sacerdote y por un matrimonio. A nivel mundial el movimiento está coordinado por el Equipo de coordinación internacional, asistido por siete Equipos eclesiales que representan los Secretariados existentes para África, Asia, Estados Unidos, Canadá, América Latina y Oceanía.
Fuente: Diócesis San Carlos de Ancud
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