Con alegría matrimonios de Valdivia, Punta Arenas, Rancagua, y Santiago entre otras ciudades, llenaron la Catedral. Entusiasmados levantaban sus pancartas, pendones y otros vestidos con polerones distintivos daban a conocer los grupos a los que pertenecían.
Algunos llevaban 10 años de casados, otros 20 y hasta cincuenta, sin embargo tenían en común el hecho de haber vivido Encuentro Matrimonial, una experiencia que marcó sus vidas.
Monseñor Ricardo Ezzati expresó: “Este aniversario nos invita a mirar la historia de salvación en la vida de cada uno de ustedes, en la vida de tantos hermanos y hermanas que a través de la experiencia de Encuentro Matrimonial han podido revitalizar con nueva energía de gracia la vida del matrimonio, de la familia”.
“Gracias al sacramento del matrimonio instituido por Jesucristo muchos hombres y mujeres no solamente viven la vida matrimonial como un hecho de la naturaleza humana sino que como un compromiso de gracia para ser de una manera muy especial testigos del amor de Dios”. En su homilía llamó a los presentes a hacer resplandecer en la cultura de hoy la belleza del matrimonio.
Un momento emotivo durante la Eucaristía fue cuando cientos de parejas renovaron sus votos matrimoniales mirándose a los ojos.
Revitalizando el amor y la relación
Morelia Villa y Luis Díaz son de La Legua y vivieron el primer encuentro que organizó Anita Gossens hace ya 40 años y hasta el día de hoy, con 57 años de matrimonio, siguen participando.
“Cuando nos casamos éramos muy jóvenes yo tenía 19 y él 23 y vivimos altos y bajos porque no sabíamos cómo ser esposos, porque hay que conocerse y nadie te enseña a ser marido, esposa, padre y madre. Nosotros tuvimos que vivir dos encuentros porque era muy difícil, ya que tuvimos nuestros cinco hijos seguidos y no nos quedaba tiempo para nosotros. Entonces surgió la oportunidad de participar en uno y con el segundo fortalecimos nuestra relación, comparte Morelia.
Luis la mira atentamente y complementa lo que ella dice. Él agradece a Anita Gossens y a los sacerdotes de esa época que los acompañaron permanentemente.
Eduardo y Jacqueline también son de la Parroquia San Cayetano de La Legua, tienen 20 años de casados y vivieron el Encuentro Matrimonial cuando llevaban 5. A ellos también los invitó y apadrinó Anita Gossens.
“Nos conocimos y empezamos a pololear en la parroquia, toda nuestra vida ha girado en torno a ella. Para nosotros fue la culminación de todos los procesos que vivimos, ya que hicimos la Primera Comunión, la Confirmación, nos casamos y luego vivimos el Encuentro Matrimonial”, cuenta Jacqueline.
Eduardo profundiza: “Ahora estamos revitalizando esta iniciativa y convocamos nuevamente a 60 matrimonios que vivieron la experiencia y nos alegramos de saber que en este tiempo sólo se habían separado dos. Eso habla muy bien de los Encuentros Matrimoniales”.
Carlos Pinto y María Leticia llevan 38 años de casados y 12 en el Encuentro Matrimonialy participan en Maipú junto a otras parejas. “Desde el momento que lo vivimos yo dije me quedo y tengo que trabajar para que otras personas puedan conocer esta experiencia”, cuenta Carlos y María Leticia agrega: “A nosotros nos cambió la vida aunque no es de un día para otro, nos ha hecho bien como pareja y como familia”.
Susana López y Aníbal Morales tienen 33 años de casados y pertenecen a la Diócesis de San Bernardo, el año 95 vivieron Encuentro Matrimonial y quisieron participar de esta celebración. Ella cuenta que ha sido muy importante. “Es una resurrección de Cristo en el matrimonio, porque nosotros lo vivimos hace muchos años y pasamos experiencias de todo tipo, buenas, no tan buenas, altos y bajos, pero una vez que vivimos el fin de semana nos cambio totalmente la existencia. Nosotros invitamos a todos los matrimonios, a aquellos que están quebrados, que han sufrido, que han pasado grandes dolores a animarse a restaurar, a revivir, a resucitar”.
Fuente: Comunicaciones Santiago
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