Pastoral Social comparte su experiencia de trabajo en Concepción

Fue algo similar a una “memoria agradecida”, en la cual mostraron las acciones realizadas desde el terremoto de febrero de 2010 a la fecha. La actividad se realizó en la parroquia San Pablo de Chiguayante.

Luego de un saludo inicial y animación del decano, padre José Durán, cada una de las coordinadoras expuso el trabajo de la pastoral social en sus respectivas parroquias. Posteriormente, el Vicario padre José Cartes entregó un mensaje motivando a las presentes a continuar con su labor. “Creo que si el Arzobispo estuviera acá estaría contento de que el trabajo que hace la Vicaría de Pastoral Social se ha incorporado como algo normal y natural en cada una de nuestras comunidades. No hay parroquia que no tenga esta pastoral, y eso es lo que tenemos que promover, porque una de las cosas importantes que incluso el Papa ha dicho es que nuestra fe sin obras no se ve, no tiene sentido. La fe tiene que estar vinculada estrechamente con un trabajo de servicio al que más lo necesita. Jesucristo, que es nuestro modelo, siempre estuvo preocupado de los más pobres y necesitados”.


A continuación, la coordinación decanal entregó distintos estímulos tanto a agentes pastorales como a sacerdotes, reconociendo en ellos su labor social. Finalmente, los presentes compartieron una rica once.


Ena Molina, coordinadora decanal, destacó que la pastoral social no solamente es ayuda fraterna, entregar ropa y víveres, sino también dignidad a la persona. “Por ejemplo con talleres de crecimiento personal como lo hemos hecho en la parroquia San Francisco de Asís de Lorenzo Arenas, incidir en la vida de las personas para que surjan a través de la evangelización. No miramos credos, sino que apoyamos a toda persona que lo necesite”.


En el plano personal, la voluntaria reconoció que este trabajo le ha cambiado la vida. “He visto que hay mucha necesidad, nunca me había enterado de esto porque uno se dedica a la familia, a educar a los hijos, pero como ahora ellos ya crecieron se me pidió este servicio de armar la pastoral social parroquial y también coordinar el decanato”. “El trabajo nos ha resultado bastante bien, porque gracias a Dios es un equipo, no hago todo esto sola. Es un buen decanato porque hemos logrado cosas con unión y esfuerzo, junto a todas las coordinadoras parroquiales de pastoral social”.


Una de las personas a quienes se agradeció su constante apoyo fue el padre Gustavo Sterkens, párroco de San Pablo, Chiguayante, quien se mostró sorprendido por tantas actividades que mostraron las parroquias del decanato Bio – Bio. “A veces uno no sabe lo que hace realmente cada comunidad en favor del más necesitado. Por eso creo que es bueno que ellos presenten sus obras y con la gracia de Dios seguir adelante motivando a otros para incorporarse a esta linda tarea de servir al hermano que sufre. Estamos agradecidos de todos los que han participado en esta jornada”.


Fuente: Comunicaciones Concepción



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